Soy de Córdoba, y hoy me gustaría hablaros de lo que es ser del Atleti desde la distancia, lejos del Manzanares, de la Capital, del Vicente Calderón.
Tengo 16 años, y llevo siendo del Atleti toda mi vida. Toda mi familia, pero sobre todo mi padre, me ha hecho sentir a este club desde que era un bebé. Habré visto en directo al Atleti unas 3 veces, una de ellas en Segunda, y solo he ido una vez al Vicente Calderón. A un derbi. Me acuerdo perfectamente. Octubre de 2008. Perdimos 1-2 con aquel penalti de Heitinga a Drenthe en el último minuto. Era a lo que estábamos acostumbrados, a no ganar nunca, hasta el 17 de mayo de 2013, que ya sabéis lo que pasó aquel glorioso día...
Ser del Atleti a distancia no te hace ser menos ni más atlético que los demás, lo sientes igual que toda la familia atlética.
Siempre tienes esa ilusión de ir al Vicente Calderón algún día, ilusión que no tienen los que van con frecuencia, a los que para ellos eso es una rutina.
Desde pequeño me he visto todos los partidos de este equipo, ya sea en la televisión o ya sea por internet. Lo he visto sufrir en Segunda, sufrir esa mediocridad durante unos años hasta por fin volver a Europa, y lo he visto tocar el cielo como nos tiene "malacostumbrados" durante estos últimos años.
Vivir cada partido en casa, con tu familia o con tus amigos, y sufrir tanto como si tú mismo estuvieses jugando ese partido.
Sueño con volver a ver un partido en nuestra casa, en el Calderón, y sentirme el más feliz del mundo durante unas horas, como lo fui aquel octubre de 2008.
En las buenas y en las malas, siempre te voy a querer, Atleti. Ya sea a 400 kilómetros, o en el mismo estadio donde tú juegas.
Ya sé que no es gran cosa esta entrada, pero es la primera. Espero que os guste e intentaré ir mejorando.
Un saludo, familia rojiblanca.
(Yo mismo, en la celebración de la Copa del Rey 2013)
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