 |
| Foto: www.marca.com |
MARCO GONZÁLEZ | Cuando las cosas van bien lo mejor es no tocarlas pero siempre existe el atractivo de la innovación. Y con eso puede jugar Simeone. Hablo del sistema táctico rojiblanco. Si la temporada pasada no se varió del 4-2-3-1 y desde que ha llegado el entrenador argentino se ha optado por ese sistema, en esta nueva temporada (y con el largo números de partidos que se prevé) Simeone puede darle un giro más a su equipo y plantear nuevos sistemas. Y ahí entra en juego mi 4-4-2 que me toca defender.
Partiendo de la base de que el 4-2-3-1 está maravillando al mundo y que es la opción más usada por los técnicos, yo busco una vuelta al clásico 4-4-2 pero con ciertos matices. Se sabe que el Atlético de Simeone rinde con ese sistema pero una variación en el sistema puede servir para no caer en la monotonía y sorprender al rival con más potencial ofensivo. Recuerden la palabra “ofensivo” que define perfectamente al 4-4-2 que tengo en mente.
Si el año pasado Falcao se bastaba sólo en ataque y se peleaba con las defensas, este año con la llegada de Villa y con acompañante en el ataque puede servir mucho al ataque rojiblanco.
Aunque debo puntualizar que este sistema lo veo ideal para los partidos en casa donde la seguridad defensiva y el empuje de la grada ayudan mucho a los muchachos de Diego Pablo. Me explico: en casa el dominio, normalmente, es rojiblanco y el empuje está a la vista pero ahí puede residir un problema: las defensas conocen al Atleti y el encerramiento puede ser una piedra en el zapato para un Atlético que no anda muy sobrado de calidad para desatascar partidos y marear a defensas perfectas. Y con este planteamiento táctico, el Atleti de Simeone puede lanzarse más al ataque con dos delanteros natos en punta, más complicaciones para sus rivales y un nuevo sistema que puede servir para esos partidos de dominio sin finalización.
Eso sí, para las salidas lejos del Calderón veo más el planteamiento actual, más armado el centro del campo y más seguridad a la hora de defender.
Otra ventaja del clásico 4-4-2 es que ante la aparente falta del mediapunta de calidad (vale que esté Óliver pero yo intuyo que Simeone no le dará la titularidad tan inminentemente), se puede potenciar con dos exteriores que abran el campo y dejen más libres a los dos delanteros. Con este planteamiento, el perjudicado sería el “mediapunta” pero aun así no se perdería su potencial ya que el “mediapunta” titular de Simeone es Koke y con este sistema el canterano puede volver perfectamente al centro del campo compartiendo pivote con Gabi, Mario o Tiago dejando así su “puesto” a un delantero. En definitiva, este sistema valdría para jugar en casa, lanzarse al ataque y cambiar ese mediapunta que está detrás del delantero por un atacante que ayude a Villa.
Y para dejarlo más claro hagamos un pequeño once tipo:
La portería y la defensa son intocables a no ser que haya lesión o rotación por cansancio pero en mi sistema no es el caso.
 |
| Foto: www.mundodeportivo.com |
El doble pivote es lo comentado en líneas anteriores: Gabi, Tiago o Mario para barrer, yo personalmente prefiero a Gabi que encima en el Calderón recoge el aire de todos los atléticos y le sirve para correr por él y por sus compañeros. Y Koke para mover el balón y lanzar el ataque, algo que ya ha hecho durante toda su vida y sobre todo en las categorías inferiores de la selección española con gran éxito.
 |
| Foto: www.colchonero.com |
Luego los extremos, que podrían ser interiores según se dé el partido, ya es una elección más complicada ya que todos los atacantes rojiblancos, salvo Villa que va a ser el ‘9’ fijo, pueden caer a banda o ser el compañero de guerra de David Villa, aunque una cosa está clara y es que la banda izquierda es propiedad de Arda Turan que con su sociedad con Filipe atormentan a los laterales derechos y sirven de salida de emergencia cuando la jugada rojiblanca entra en atasco.
 |
| Foto: www.colchonero.com |
Ahora, el derecho ya es a elección de Simeone: Adrián (si está en forma es casi imparable), Baptistao o el mismo Óliver Torres, si queremos poner más calidad al asunto, son válidos para cubrir el ataque derecho del Calderón. Y lo mejor de todo es que cualquiera de ellos, aunque un poco menos Óliver, servirían para darle un toque mucho más ofensivo al ataque atlético en comparación al otro sistema.
 |
| Foto: www.marca.com |
Y finalmente, arriba tendríamos dos delanteros que se ayudarían para matar los partidos. Uno podría pegarse con el rival, tanto Diego Costa como Villa lo hacen genial, y el otro abriría espacios para que su compañero aprovechase la calidad que viene desde atrás. Imaginar con la dupla Villa y Diego Costa me hace soñar con grandes cosas pero la dupla asturiana Villa y Adrián ayudarían a mis sueños a seguir viendo grandes imágenes.
 |
| Foto: www.lavanguardia.com |
Con este sistema perdemos cierto poder defensivo pero ganamos muchísimo potencial ofensivo, dos delanteros dan mucho juego y con Koke en el medio muchos problemas de juego se acabarían (ya que no traen al mediapunta que pide Simeone…) y habría varias opciones en caso de que se complicase el partido. Contaríamos con tres jugadores que saldrían desde el banquillo y que encajarían a la perfección con el sistema y que seguirían dando esa vocación ofensiva al equipo. ¿Quiénes serían esos tres jugadores? Pues según el estado de forma. Se me hace la boca agua con Óliver pero Adrián en forma puede ser letal o también podría ser Cristian Rodríguez para abrir el campo. Todos válidos.
Lo que está claro es que hay suficientes motivos para poder confiar en este sistema pero también suficientes hechos para continuar con el famoso 4-2-3-1. Simeone tendrá la última palabra.
Twitter: @Mr_Markoo
Coincido en el sistema, 4-4-2, pero no veo al Cholo quitando un bolardo del centro. Koke y Arda partiendo desde la banda y Mario y Gabi tapando los huecos que pueda haber. Arriba los dos claros y si acaso Adrián o Leo pegados a una banda para buscar velocidad.
ResponderEliminar