El peso del escudo

RUBÉN MARTÍ| Hacía mucho tiempo que a los atléticos se nos había olvidado lo que era ser grande. Muchos años con "grandes" fichajes y "grandes" entrenadores, que acababan arrastrándose por el campo y que no hacían honor, ni a su valía, ni al escudo que representaban. Años en los que cualquiera que viniera al Calderón, podía sacar puntos sin que a nadie le resultara extraño. Años en los que venía un equipo como el rayo que vino, con un jugador como Lass y a todos nos temblaban las canillas. En los que ir al Sanchez Pizjuan era traerte una derrota en el ave o en lo que ibas a Anoeta y si jugabas bien, o matabas o te empataban y si jugabas mal perdías seguro. Algo que no hacía honor al peso en la historia que nuestro escudo tiene y merece.



Pues parece que esos tiempos se acaban y de la mano del Cholo Simeone, al que nunca se lo agradeceremos bastante, reverdecen antiguos laureles.

Ahora el equipo sale al campo e infunde respeto. Los equipos rivales saben que van a tener que sudar mucho para sacar algo positivo, y que si es en el Calderón ese sudor será sangre. Saben que aunque el equipo no esté jugando bien, va a tener la oportunidad de llevarse el gato al agua y notan sobre ellos la presión del escudo que lleva nuestra camiseta. Saben que enfrente está un grande y que aunque no estén jugando los titulares, son favoritos y que juegan para ganar. Sienten el peso de la historia de esta camiseta y hace que no nos haga falta hacer nuestro mejor partido ni hacer el mejor fútbol para conseguir la victoria.

Esto es algo que muchos aficionados atléticos, por edad, no han vivido y si me apuran yo muy poco y que a otros muchos se les había olvidado, pero a lo que parece que nos tenemos que acostumbrar nuevamente. Y esto que escribo es para que los que han crecido comparándose con los Valencia, Sevilla, Villareal o Málaga de turno, sepan que cuando este que escribe era niño se comparaba a Madrid y Barça. Para la gente de mi generación, estos equipos que cité antes no eran un enemigo a seguir, aunque con el paso de los años y más por deméritos nuestros que por aciertos suyos lo han conseguido.

 Aunque a día de hoy debido a una nefasta gestión del "cluz" que diría nuestro presidente y a una cruel diferencia de ingresos en los derechos televisivos no podamos optar a disputar la liga a con Barça y Madrid, si que parece que abrimos brecha con el resto de equipos y ese es el primer paso para volver a disputar la liga con los dos transatlánticos y que desde ya quedar terceros o cuartos, no será un objetivo, sino una obligación. Que todo lo que sea bajar de ahí será un fracaso.

Llegados aquí solo me queda daros la bienvenida al antiguo Atleti a los jóvenes y a los olvidadizos, y esperar que no se vuelvan a torcer las cosas y que las futuras generaciones conozcan desde el principio al Atleti de verdad.





Por Rubén Martí

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